La respuesta a la pregunta de cómo mejorar la inmunidad de las plantas es bastante simple: es suficiente para proporcionarle condiciones de crecimiento óptimas. Desafortunadamente, el cumplimiento de la respuesta ya plantea muchos problemas. Después de todo, cada planta tiene diferentes requisitos … Entonces, ¿cómo mejorar la inmunidad de las plantas?
Hay una serie de métodos para ayudar a cuidar la inmunidad de las plantas. Uno de los más importantes es el uso de fertilizantes naturales, con un alto contenido de materia orgánica.
¿Cómo mejora la materia orgánica la inmunidad de las plantas?
La materia orgánica es alimento para los microorganismos beneficiosos del suelo. Son para la planta y el suelo, como la flora bacteriana es para los humanos: mejora la inmunidad y ayuda a la digestión. Los microorganismos del suelo mejoran la estructura del suelo mediante el tratamiento de la materia orgánica y ayudan a las plantas a absorber nutrientes. A diferencia de los fertilizantes artificiales, que destruyen los microorganismos del suelo, los fertilizantes que se basan únicamente en la materia orgánica les ayudarán a crecer.
¿Los fertilizantes artificiales debilitan la planta?
Los fertilizantes artificiales son un impulso de energía, dan mucha comida, obligando a la planta a tomarla. La planta crece rápidamente, pero sus tejidos son más delicados y el sistema radicular es perezoso, no tiene que crecer en busca de alimento. Desafortunadamente, esto afecta la susceptibilidad de la planta a los patógenos, así como la sequía y la congelación.
¿Cómo prevenir las enfermedades y plagas en plantas?
La prevención de enfermedades y plagas en las plantas es fundamental para mantener un jardín saludable y productivo. Aquí te presentamos algunas medidas que puedes tomar para evitar enfermedades y plagas en tus plantas.
Compra plantas saludables: Asegúrate de comprar plantas que parezcan saludables y no presenten signos de enfermedad o plagas. Examina cuidadosamente las hojas, tallos y flores de la planta antes de comprarla.
Espacio adecuado: Asegúrate de plantar tus plantas a la distancia adecuada para permitir una buena circulación de aire y reducir el riesgo de enfermedades. Las plantas que están demasiado cerca pueden crear un ambiente húmedo que favorece el desarrollo de enfermedades.
Riego adecuado: Proporciona la cantidad adecuada de agua a tus plantas para evitar que se sequen o se mojen demasiado. El exceso de agua puede crear un ambiente húmedo que favorece el crecimiento de enfermedades y plagas.
Mantén limpio el jardín: Mantén el jardín limpio de hojas y ramas caídas, ya que pueden atraer plagas y enfermedades. Asegúrate de desechar estas hojas y ramas adecuadamente.
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