Tipos de macetas y sustratos para cultivar plantas ornamentales. La elección de una planta exige tanto cuidado como la compra de cualquier otro objeto para un hogar. La planta tiene que combinar con su entorno, así como crear un adorno atractivo. Además, es esencial comprar una planta sana que dure largo tiempo. La compra de una planta barata que se muere en unas pocas semanas suele ser una equivocación.
Compruebe las plantas y descarte aquéllas con raíces que salen por los agujeros de drenaje, con hojas marchitas, infestadas con plagas y enfermedades o en las que el abono y la maceta estén cubiertos de musgo o limo. No compre tampoco las plantas expuestas al sol o a corrientes de aire.
También es importante llevar las plantas rápidamente a casa y aclimatarlas a la vida interior. Asegúrese de que le envuelvan la planta en la floristería; esto evitará que le dé el aire y reducirá la posibilidad de golpes que dañen las hojas o flores. No coloque plantas en el maletero del coche si hace demasiado frío o calor. Es mejor colocarlas de pie en cajas dentro del coche. Cuando las plantas lleguen a casa sitúelas en una posición no muy soleada, cálida y sin corrientes de aire durante una semana.
Si al principio se caen unos pocos capullos u hojas, no se preocupe porque la planta está probablemente aclimatándose. Durante este período inicial, compruebe que la planta no está contaminada con plagas y enfermedades.
Macetas de barro y de plástico
Los tamaños de las macetas varían desde 36mm a 38cm de ancho (diámetro superior). Se suelen utilizar cuatro tamaños: 7,5cm, 13cm y 18cm. Las plantas grandes y verticales de suelo pueden necesitar una maceta de 25cm. Existen platillos complementarios sobre los que colocar las macetas. Las macetas de barro son los recipientes clásicos para plantas. Crean una base firme y armonizan con las hojas y flores. Su naturaleza porosa permite que se evapore el exceso de humedad por los laterales y también pueden escapar las sales tóxicas. Pero a veces son preferibles las maceras de plástico, especialmente para plantas que necesitan un compost de turba. Como la humedad no se evapora en estas macetas, es importante no regar en exceso.
Al comprar una planta, rechace las que tengan musgo o limo en la maceta o en la superficie del compost. Esto revela negligencia e indica que las raíces de la planta están muy congestionadas; aunque la trasplante, no durará.
Si una planta está marchita puede deberse a la falta de humedad o a un compost inundado. Plagas como los pulgones causan problemas similares.
No compre plantas en plena flor, ya que su belleza pronto quedará mermada. Es mejor comprar plantas que tengan unos pocos capullos que den color y muchos más esperando abrirse. Ni plantas marchitas.
Muchos aficionados prefieren las macetas de barro porque su textura y color son naturales y no desentonan con las plantas. Son más escasas que las de plástico y se rompen fácilmente.
Hay macetas de plástico de muchos colores, incluyendo verde, blanco, amarillo y negro. Son ligeras y baratas, pero carecen del atractivo estético de las de barro y se suelen ocultar en recipientes.
Compost que respetan el medio ambiente
Los composts sin turba son el último invento en compost y se están haciendo muy populares porque no implican la continua destrucción del hábitat natural de muchas plantas y animales.
El principal ingrediente de estos compost es generalmente fibra de la corteza del coco —un material utilizado en el pasado para fabricar sogas y colchones.
Los jardineros suelen preferir compost de turba o marga, pero merece la pena experimentar con los de fibra de coco que tienen muchas de las cualidades de la turba, como la retención de humedad y la aireación. Existen composts listos para usar basados en fibra de coco y, después de usarlo, el compost puede reutilizarse como mantillo alrededor de las plantas de exterior.
En el futuro, habrá también compost compuestos de materiales como paja, corteza y fibra de madera.
Compost de turba y marga
Proporcionan anclaje para las plantas y humedad, alimento y aire para las raíces. La tierra de jardín no es adecuada para las plantas de interior ya que su calidad es variable. También está mal drenada y puede contener semillas de cizalla, plagas y enfermedades. Así pues, se necesitan compost especialmente preparados; hay dos tipos. Compost de marga formados por marga parcialmente esterilizada (capa superficial de suelo buena), turba y arena, además de fertilizantes. Estos composts son:
• más pesados que otros tipos y dan estabilidad a plantas grandes;
• difíciles de secar tan rápida o completamente como los otros tipos;
• más ricos en oligoelementos que otros tipos de compost;
• capaces de hacer crecer a la mayoría de las plantas de interior.
Compost de turba son mucho más recientes que los de marga
• más uniformes en calidad que los de marga;
• susceptibles de secarse más rápidamente que los de tierra y son difíciles de volver a humedecer;
• más ligeros para llevarlos en bolsa que los de marga;
• más pobres en nutrientes que los compost de marga, así que deberá abonar sus plantas al principio;
• fácilmente almacenables incluso después de abrir la bolsa —dóblela y ate el extremo;
• cuando está almacenada en las floristerías, la turba suele volverse compacta. Antes de utilizar el compost, agite bien la bolsa para descompactarla.
Índice de Contenidos