Entre las especies de plantas bulbosas de floración primaveral, las fresias son de las más apreciadas por la gran cantidad de flores que producen, el color intenso y vivo de las mismas y su intensa y agradable fragancia. Las especies híbridas (las que se encuentran a la venta en floristerías y centros especializados) son las más cultivadas por su resistencia. Todas estas plantas son oriundas del África del Sur, donde viven principalmente en zonas húmedas y no excesivamente frías y protegidas de los excesos de sol directo.
Ficha informativa de la planta Freesia x hybrida
Nombre común | Fresia |
Nombre científico | Freesia x hybrida |
Familia | Iridaceae |
Origen | Nativa de África del Sur |
Tipo | Plantas Bulbosas |
Nombre común de Freesia x hybrida:
- Fresia
Nombre científico de Fresia:
Freesia x hybrida
Familia:
Iridaceae
Origen:
Nativa de África del Sur
Descripción y características:
La Fresia es una planta herbácea, de hojas ensiformes, aplanadas y flores vistosas, fragantes, dispuestas en espigas unilaterales. Las flores son hermafroditas y ligeramente irregulares. El perigonio está compuesto de seis tépalos subiguales entre sí, unidos con el tubo perigonial algo curvado y los lóbulos aovados, obtusos.
Cuidados y mantenimiento de Fresia (Freesia x hybrida):
Se debe colocar en semisombra o en interiores con alta luminosidad. No tolera bajas temperaturas. Requiere suelos ligeramente ácidos con abundante materia orgánica. El riego se realizará cada dos o tres días durante floración. Se recomienda la fertilización en el agua de riego con fuentes complejas y la eliminación de malas hierbas. Su floración es corta. Se propaga mediante división de bulbos y semilla.
Usos:
Planta que se puede colocar en jardines, rocallas, macetas, y para flor de corte.
Plagas y enfermedades
Virus del mosaico y enfermedades fungosas.
Reproducción:
Las fresias se propagan por los nuevos brotes laterales que desarrollan y pueden ser plantados en primavera o en otoño, bien en macetas o jardineras, en un sustrato que sobre todo drene bien.
A la hora de plantar los bulbos hay que hacerlo a una distancia de alrededor de 8 cm. unos de otros y a una profundidad de 5 cm. en macetas puede plantarse más juntos. El suelo donde se planten los bulbos debe ser ligeramente ácido.