El jardín de las hierbas aromáticas

jardín de las hierbas aromáticas

A lo largo de la historia se pueden encontrar muchas referencias al uso de hierbas.  La Biblia hace referencia al uso de hierbas, pero la documentación medieval antigua se remonta más atrás.

¿Por qué cultivamos hierbas?

La más lógica es para dar sabor a nuestra comida, pero hay muchas otras razones.  Las hierbas pueden cultivarse para la siembra complementaria, para controlar las plagas en el jardín.  Algunas hierbas pueden utilizarse como té, popurrí, con fines medicinales o añadirse a productos no comestibles.

Las hierbas aromáticas pueden ser muy versátiles y son muy indulgentes para el jardinero novato. Puedes cultivarlas en una maceta en una ventana soleada o al aire libre en el jardín.  Sorprendentemente, muy pocos bichos o enfermedades las dañan y por eso otras plantas se desarrollan bien cuando se encuentran junto a ellas.  Los fertilizantes para las hierbas son un gasto innecesario.

Las hierbas no sólo son anuales y perennes, sino que también crecen como arbustos y árboles.  Se pueden cultivar por sus usos culinarios en la cocina o para adornar un plato para atraer al paladar.  Algunas se cultivan por su aroma y otras por la pura belleza de su follaje o sus flores.  Las hierbas pueden utilizarse frescas o secas.

Cuando plantes en el exterior, intenta elegir una zona soleada.  Es importante que el suelo esté bien drenado; enmiéndalo si es demasiado húmedo o demasiado compacto. Añadir un poco de compost ayudará a que el suelo sea más compatible con el cultivo.

Puede ser muy divertido cultivar hierbas a partir de semillas

Asegúrate de no plantarlas a demasiada profundidad; cuanta más pequeña sea la semilla, menos profunda debe plantarse. Las hierbas se pueden cultivar en macetas, parcelas, cestas colgantes; se pueden cultivar entre las rocas, utilizarlas en los arriates o mezclarlas con flores u hortalizas.  No parecen estar fuera de lugar dondequiera que las plantes.  Los beneficios de esto pueden ser enormes.  Puedes tener hierbas a mano para cocinar y, además, en el jardín tus plantas tienen un control de plagas las 24 horas del día. Se pueden meter fácilmente entre las flores y las verduras, añadiendo mucha variedad de color y fragancia.

Si quieres tener un jardín de hierbas al instante, puedes comprar algunas variedades en tu centro local del hogar. Comprando en una maceta de tamaño pequeño no tardará en florecer, ten preparada tu nueva maceta más grande o un lugar para plantar tu hierba en crecimiento.  Pero no tendrás una gran selección ya empezada.  Hay muchas variedades incluso de un tipo de hierba, como la albahaca, en todo el mundo hay más de 160.   Las semillas te darán una mayor variedad para elegir.

Si eliges tus hierbas con fines culinarios, escoge las que te gusten y vayas a utilizar.  El eneldo, la salvia, el tomillo y el perejil son un buen punto de partida si no estás seguro y serán grandes compañeras de otras plantas que puedas tener.

Así que diviértete con tu nueva afición de cultivar hierbas. Aunque te parezca que no tienes habilidad para la jardinería, plantar hierbas hará que aumente tu confianza.