¿Qué trabajos de jardinería hacer a principio de año?

Qué trabajos de jardinería hacer a principio de año

Y en los meses de enero y febrero debemos comenzar a preparar el espacio para la próxima temporada. Pensando en ello, en esta ocasión compartimos cuáles serían los trabajos de jardinería ideales para esta temporada.

Es tiempo de los árboles frutales

A principios de año, debemos preparar el jardín para la primavera. Todos queremos una temporada mejor y más próspera, una primavera y un verano en los que poder disfrutar de muchas verduras y frutas frescas y sabrosas; y para ello, debemos comenzar con la planificación e incluso, la plantación de ciertas especies frutales.

Limpiar el jardín

Todavía es importante mantener limpio el jardín, pero también el patio. Por ello, debemos cuidar constantemente su limpieza. Recoja siempre los restos de plantas, así como otros desechos del suelo. El segundo mes del año y en especial los últimos días son ideales para una limpieza general en tu jardín.

Fertilizantes adecuados

Durante este período es el momento de ocuparse de los fertilizantes. En febrero debemos iniciar con la aplicación de fertilizante a nuestras plantas, dependiendo de sus necesidades. El mejor cuidado de las plantas depende de la cantidad de nutrientes que les aportemos.

Cuidado de las flores

A principio de año, también debemos prestar atención a las flores. Si ya ha plantado flores en su jardín, este es el momento ideal para retirar las hojas marchitas. Sin embargo, tenga cuidado de no plantar flores demasiado pronto.

Plantación de verduras

Es hora de dejarla y seguir adelante. Puede comenzar a plantar sus vegetales favoritos en febrero, pero esto solo se puede hacer si el suelo no está congelado. Lleve un registro de la temperatura y observe el clima en Internet para ver si puede plantar vegetales.

Proteger el jardín de las plagas

Es hora de proteger el jardín de las plagas. Si las temperaturas afuera en febrero comienzan a subir, significa que las plagas también se están acumulando. Procura que la tierra esté lo más limpia posible, siempre descubierta de hojas u otros restos vegetales. Estos residuos de plantas no solo son antiestéticos, sino que también pueden proporcionar un entorno favorable para las plagas.