Al contrario que las plantas de exterior, las de interior están en un entorno artificial: sus raíces están confinadas en una pequeña cantidad de tierra que puede regarse demasiado o muy poco; suelen estar expuestas a altas temperaturas aunque haya poca intensidad de luz; la temperatura puede fluctuar rápidamente durante el día y, en invierno, pasar frío por la noche cuando se apagan las calefacciones. Resulta pues asombroso que sobrevivan tantas plantas de interior; no hay duda de que se debe al entusiasmo y vigilancia de los que las cultivan.
La mayoría de las plantas no desarrollan todo su potencial y ello es debido a que no son abonadas regularmente. Las que reciben una dieta equilibrada tienen más posibilidades de sobrevivir a una infección de plagas o enfermedades que las que están poco alimentadas. Sin embargo, no las abone en exceso, ya que esto hace que el abono se vuelva tóxico, retardando su crecimiento e incluso matándolas. Tampoco debe abonar las plantas que florecen en verano o las de hoja después de finales del verano, porque provocará un crecimiento excesivo propenso a plagas y enfermedades, justo cuando la planta se prepara para su descanso invernal.
Productos Químicos
Hay diversos modos de aplicar productos químicos a las plantas: el más común es pulverizar con un insecticida concentrado diluido en agua. Algunos pulverizadores líquidos vienen listos para usar. También son eficaces los polvos, pero pueden dejar residuos poco atractivos. Otros métodos son regar el compost con un insecticida sistémico y usar palitos insecticidas.
Los palitos insecticidas son un método rápido, limpio y eficaz de controlar las plagas de las plantas. Cada palito contiene un insecticida sistémico que vuelve a la planta tóxica para los insectos. Los insecticidas en polvo no son muy populares, pero son rápidos y eficaces; cuando se usen polvos, debe distribuirlos uniformemente y sacar la planta fuera para evitar su inhalación y proteger los muebles y las cortinas. Cuando aplique un pulverizador líquido, primero ponga la planta dentro de un cubo limpio o una bolsa de plástico grande. Luego aplique el pulverizador y deje el recipiente cerrado durante una hora. Saque la planta y deje que se dispersen los gases.
Seguridad con Productos Químicos
Todos los productos químicos utilizados para controlar plagas y enfermedades deben manejarse con cuidado.
- Mantenga estos productos fuera del alcance de los niños, y nunca los ponga en botellas que éstos pudieran confundir con las de un refresco.
- Siga siempre las instrucciones del fabricante. La utilización de un producto químico en una concentración más alta no mejora su eficacia, e incluso puede dañar las plantas.
- Algunas plantas son alérgicas a algunos productos, así que compruebe la etiqueta, especialmente cuando pulverice sobre palmeras, helechos, cactus y otras suculentas.
- No mezcle nunca varios productos, a no ser que esté recomendado.
- Siempre que sea posible, saque las plantas al exterior para pulverizarlas. Nunca utilice pulverizadores en habitaciones con pájaros, peces u otros animales.
- No use nunca pulverizadores químicos cerca de la comida o la fruta, y evite pulverizar sobre papel pintado y telas.
- No piense que los insecticidas derivados de extractos naturales de plantas no son peligrosos.