Mantenimiento y cuidados de las plantas en casa

A no ser que se las limpie regularmente, muchas plantas se ensucian o desarrollan una masa de brotes enmarañados que reducen su atractivo. El polvo impide que las hojas funcionen y hagan crecer a la planta. Bloquea los poros de respiración (estomas) y reduce la cantidad de luz que llega a las células de crecimiento que hay en las hojas.

Si las hojas grandes y suaves están cubiertas de polvo, utilice un trapo suave para quitarlo antes de frotarlas con agua. Nunca coloque las plantas al sol antes de que se seque la humedad que tengan; las gotas actúan como lentes e intensifican los rayos del sol, quemando las hojas y haciendo que se sequen y se vuelvan marrones.

Para limpiar las hojas es mejor el agua blanda y no caliza (agua de lluvia o agua del grifo hervida en zonas de agua dura); aunque también se recomiendan la leche, la cerveza y el vinagre muy diluido, sus efectos son escasos. En el mercado existen diversos productos para limpiar las hojas.

Cuidado de las hojas

Muchas plantas se cultivan específicamente  por sus atractivas hojas. Si se ensucian o se dañan, pierden belleza. Así pues, es importante limpiar las hojas, el método para hacerlo depende de su tamaño y textura. Las hojas dañadas pueden cortarse, así como los brotes largos y mal colocados.

Cuando algún tallo vigoroso estropea la forma de una planta, use unas tijeras para cortarlo justo por encima de un nudo de hoja. A las azaleas quitar brotes largos.

Corte las hojas muertas, pero evite dejar pequeñas protuberancias que luego morirán. Si las hojas muertas están en la parte superior de un brote, es mejor cortar el tallo en su base.

Cuidado de las flores

Las plantas de flor necesitan atención continua cuando están floreciendo. Si no se cuidan, las flores muertas permanecerán en la planta y podrán aparecer enfermedades. Además, al quitar las flores marchitas se aumenta el período de floración porque se forman más capullos. A veces se quitan la flor y su tallo.

Las flores muertas se arrancan individualmente y se colocan en un montón de compost. Las azaleas producen gran profusión de flores durante varias semanas; según se marchiten las primeras, sujete el retoño y quítelas con los dedos.

Cuando se esté muriendo un ciclamen, arranque cada flor marchita con su tallo. Sujete el tallo firmemente y tire de él. Se separará de la base de la planta. Si sólo quita la flor, el tallo se estropea enseguida y hace que se estropeen otras flores y tallos. También queda feo. Coloque las flores y tallos en un montón de compost; no las deje en la base de la planta.

Cuidado en vacaciones

Muchas plantas se cuidan con esmero todo el año para que acaben estropeándose o muriendo cuando usted se va de vacaciones. Los vecinos suelen encargarse de ellas, pero a no ser que la persona tenga experiencia en cuidar plantas, es posible que acaben muertas de sed o regadas en exceso. Ambas cosas pueden causar su muerte.

En lugar de confiar en otra persona, se pueden construir mecanismos de riego automático.

Unos días antes de marcharse, quite las flores que habrán muerto para cuando vuelva. Corte también las hojas dañadas, especialmente si son blandas y vellosas Si las plantas son grandes, es mejor dejarlas en sus recipientes, cambiarlas al centro de una habitación algo umbría y colocarlas sobre una lámina grande de polietileno. Durante la semana antes de sus vacaciones, riegue la tierra varias veces. Si las vacaciones son sólo de una semana o diez días, será suficiente con estas operaciones para mantenerlas sanas.

Las plantas pequeñas se pueden colocar en bandejas grandes con 1 ó 2 cm de agua en su base. Esto las mantendrá vivas unas dos semanas, especialmente si se ponen a la sombra.
Otro método es colocar una bayeta sobre un escurreplatos y poner un extremo dentro de un fregadero lleno de agua. También puede meter el extremo en un cuenco con agua. Coloque las plantas sobre la bayeta. Este sistema funciona bien cuando las plantas están en macetas de plástico llenas de compost de turba y sin cascotes en la base.

Otro método es colocar una maceta de agua sobre un platillo invertido e introducir unas mechas (con el otro extremo metido en agua) dentro de la tierra.