Ficus Ficus benjamina

Árbol siempre verde de corteza gris y lisa, con el ramaje colgante, que puede alcanzar en cultivo 8-10 m. Estípulas de 0.8 cm de longitud, glabras. Hojas ovado-elípticas de hasta 13 x 6 cm, simétricas, con la base obtusa o redondeada y el ápice acuminado gradualmente. El Ficus benjamina, es la planta reina por preferencia en los interiores de las casas, que puede alcanzar los 30 m de altura en condiciones naturales, con gráciles ramas péndulas y hojas gruesas de 6-13 cm de largo. Sus pequeñas frutas son alimento favorito de varias aves en Malasia y Tailandia, donde es nativo.

Si no has cultivado esta planta antes, seguro que no sabes cómo cuidar el ficus benjamina. En realidad, no es tan difícil como puede parecer porque el ficus no tiene pretensiones. Estas son mis sencillas recomendaciones sobre el cuidado del ficus benjamina. Personalmente creo que lleva poco tiempo y da mucha alegría.

En cuanto al riego, recomiendo hacerlo de forma moderada. También es importante rociar las hojas con agua tibia hervida.

Cuando la gente me pregunta por el abono, aconsejo hacerlo abundantemente de mayo a septiembre una vez cada 2-4 semanas. Utiliza abonos orgánicos y minerales que se pueden comprar en tiendas especializadas. Nutre la planta una vez al mes de octubre a abril.

Si te preguntas dónde colocar la maceta con el ficus, te recomiendo mantener el ficus benjamina al aire libre en verano, por ejemplo en el jardín o en el balcón. Sin embargo, evita la luz solar directa. Si mantiene el ficus benjamina en el interior, la temperatura debe ser de al menos 10° С y la humedad del aire – 50-75%.

Planta que se desarrolla en climas cálidos y soleados. No soporta las heladas a menos que sean débiles y esté aclimatado. Necesitan luz abundante para conservar las hojas. Se adapta a todo tipo de suelos pero requiere riegos frecuentes y fertilizaciones cada mes. Resiste muy bien la poda. Se multiplica por esquejes, semilla y acodo aéreo.

Recortar las puntas de las ramas para conseguir un ficus más frondoso. Si mantenéis un ficus benjamina bien recortado, creará más hojas y se verá más poblado. Debemos realizar al menos cuatro podas anuales.

Consejos para tener saludable tu ficus benjamín o falso laurel

• Las hojas son la principal decoración de un ficus. Además, pueden informarle sobre el estado de salud de la planta. Siga unos sencillos consejos para conservar las hojas verdes, resistentes y fuertes.
• Si ves que las hojas jóvenes son demasiado pequeñas y las viejas están amarillas, significa que la planta carece de elementos nutritivos. Debe abonar la tierra o trasplantar su higuera llorona.
• En caso de aparición de manchas amarillas deje de regar durante un tiempo. Esta noción señala un riego abundante.
• Las hojas también pueden secarse y amarillear a causa de los rayos directos del sol. La caída de las hojas inferiores es un fenómeno natural, especialmente en el ambiente interior, pero el tronco no debe quedar completamente desnudo.
• La exposición total del tronco puede producirse debido a un retraso en el trasplante o a un trasplante en suelo pobre, a cambios bruscos de temperatura y a regímenes de luz.
• Las manchas marrones en los bordes pueden indicar una temperatura elevada en la habitación, aire seco o sobrealimentación.
• Cree condiciones moderadas para evitar que las hojas del ficus benjamina se curven, se sequen, amarilleen y se pongan marrones.

Cuidado del ficus benjamina en interior

La mayoría de los ficus disfrutan de la luz indirecta o filtrada, mientras que las variedades variegadas pueden soportar la luz media. La luz directa y brillante puede provocar el escaldado de las hojas y su pérdida.

Los ficus tampoco toleran las bajas temperaturas ni las corrientes de aire. Deben mantenerse a temperaturas superiores a los 16 C. y, de hecho, prefieren temperaturas de 21 C. Las corrientes de aire frío procedentes de ventanas o puertas les perjudican, así que asegúrese de colocarlos en un lugar donde las corrientes de aire no sean un problema.

Cuando se cultivan ficus en interiores, es importante mantener una humedad relativamente alta alrededor de la planta. La nebulización periódica o la colocación del ficus en una bandeja con guijarros llena de agua es una buena forma de aumentar la humedad, pero ten en cuenta que, aunque les gusta la humedad alta, no les gusta tener las raíces demasiado húmedas. Por lo tanto, cuando riegue, compruebe siempre primero la parte superior de la tierra. Si la parte superior de la tierra está húmeda, no riegue, ya que esto significa que tienen suficiente humedad. Si la parte superior de la tierra está seca al tacto, significa que necesita agua.

Además, cuando cuides de un ficus, ten en cuenta que crecen rápidamente y necesitan muchos nutrientes para crecer bien. Abónelos una vez al mes en primavera y verano y una vez cada dos meses en otoño e invierno.

Se usa principalmente como planta de exterior, en el arte topiario y para maceta.

El ficus puede tener tendencia a perder sus hojas inferiores y normalmente no vuelven a brotar. Para conseguir una solución estética a este problema es necesario un recorte de sus ramas inferiores y formar el ficus como si fuese un pequeño árbol.

Hojas pegajosas, las hojas del ficus benjamina se hacen pegajosas y tienen una melaza. Este problema es debido a la aparición de cochinilla o pulgón en sus hojas, estos insectos segregan esta melaza y hacen que las hojas queden pegajosas. Para solucionar este problema debemos aplicar un insecticida mezclado con un jabón fosfórico. Pulverizar bien todas sus hojas y repetir la aplicación a los diez días.

Aparición de pulgón y cochinilla, son insectos que se instalan en las puntas de las ramas o en los tallos. Va acompañado del problema anterior. Revisar periódicamente las hojas y ramas de los ficus y a la mínima presencia de estos insectos combatirlos con un insecticida.

Las enfermedades del Ficus benjamina se manifiestan comúnmente en los cambios de color de las hojas. Si cuida esta parte de la planta y la riega con moderación, no tendrá esos problemas. ¿Y las plagas? ¿Son realmente peligrosas para tu ficus?

Los microorganismos más populares que hacen daño a la planta son la cochinilla acorazada y la araña roja del carmín. La primera suele alimentarse de palmeras, limoneros, hiedras, espárragos, adelfas, mirtos, ficus, etc. Sus larvas se adhieren a la planta y se alimentan de su jugo. Están cubiertas de un escudo ceroso y tienen el aspecto de una brizna de hierba. Se pueden matar con la ayuda de soluciones químicas especiales que se venden en las tiendas de jardinería. El tratamiento puede durar hasta un mes. Todos los árboles infectados por escamas acorazadas deben ser aislados de los sanos.

La reproducción del ficus benjamina se realiza principalmente mediante esquejes en primavera con una humedad alta o por acodo aéreo, que consiste en colocar tierra a una rama en altura mediante un recipiente a la rama que queremos esquejar, para que enraíce y poder cortar una vez a enraizado.